Las capitulaciones matrimoniales son un acuerdo legal firmado por los futuros cónyuges antes o durante el matrimonio, en el que establecen el régimen económico que regirá su unión, es decir, cómo se administrarán sus bienes y qué ocurrirá en caso de separación o divorcio.
Documentación necesaria:
Identificación de los contrayentes: DNI, pasaporte o tarjeta de residencia.
Certificado de nacimiento de ambos contrayentes (si no están casados previamente).
Certificado de empadronamiento (opcional, pero útil para confirmar residencia).
Estado civil: Si alguno de los contrayentes ha estado casado anteriormente, debe presentar el certificado de matrimonio anterior y sentencia de divorcio o certificado de defunción del cónyuge anterior.
Documentación adicional: Si se desean incluir acuerdos específicos sobre bienes (por ejemplo, la inclusión de bienes previos al matrimonio), puede ser necesario presentar documentos relativos a esos bienes (escrituras, contratos, etc.).
Una vez reunida la documentación, los contrayentes deben acudir a la notaría para firmar las capitulaciones matrimoniales, que quedan inscritas en el registro civil correspondiente.